El hambre emocional y el ayuno intermitente

¡Hola de nuevo! Lo prometido es deuda, así que hoy os traigo el resto de entrevista que le hice a Edgar Barrionuevo. Os ha gustado muchísimo la primera parte y estoy muy feliz de poder compartir con vosotras este segundo capítulo. La verdad es que a mí me sorprendió bastante todo lo que nos contó a modo introductorio y tengo que decir, que estoy aprendiendo muchísimo en el curso TEVAI (clica para ser ayuner) que ofrece.

Como os dije, en esta segunda parte de la entrevista vamos a poner foco al hambre emocional y descubrir aspectos interesantes asociados con la práctica del ayuno intermitente. 

El hambre emocional fue uno de los temas más votados y la verdad es que lo entiendo, creo que es algo que nos pasa a la mayoría y me encanta que poco a poco profundicemos en este tema y aprendamos a distinguir el hambre real, del hambre provocado por la ansiedad, las emociones o el estrés. Yo soy una persona muy emocional y me cuesta mucho que las emociones no afecten a mi alimentación. Con cabeza y hábitos, estoy cada día llevando un estilo más saludable y eso me encanta. Me doy mis caprichos y como de todo, pero siempre busco el equilibrio. 

Como os dije en la primera parte, no practico ayuno intermitente de manera habitual, simplemente escucho mi cuerpo en cada momento para saber que me está pidiendo. La práctica del ayuno intermitente me provoca mucha curiosidad y por eso me gusta ir profundizando poco a poco. Teniendo la oportunidad de hablar con Edgar Barrionuevo, no quería olvidarme de ninguna pregunta que os pudiera interesar.

¡Allá vamos!

¿Se puede mejorar con el ayuno la relación con la comida? 

Pues la verdad es que sí, y mucho. El nervio vago es el encargado de conectar el cerebro con los órganos de nuestro cuerpo, por lo que cuando tenemos hambre este nervio es el encargado de mandar la información del sistema digestivo al cerebro para generar la acción. Cuando tienes hambre algunos indicadores sanguíneos disminuyen como es el caso de la glucosa y los ácidos grasos lo que despierta el instinto de comer para continuar con el equilibrio y el funcionamiento celular.

Cuando enseñas a tu cuerpo que no depende totalmente de la comida para tener energía, es un gran descubrimiento y a la vez una gran libertad. Puede ser la gran ayuda que muchas personas que son muy dependientes de la comida necesitan. Ahora bien, merece la pena hacerlo con apoyo y con mucho conocimiento. 

Entonces, ¿practicar el ayuno intermitente nos puede ayudar a distinguir el hambre “real” del hambre emocional?

Por supuesto que sí, pero evidentemente siempre y cuando enfoquemos el ayuno intermitente de la manera correcta. El aprender a estar horas sin ingesta, sin comer nada y que estés desde un punto de vista emocional tranquila, sin nerviosismo, sin ansiedad, te va a dar muchísima fuerza, te va a entrenar a que tengas mucho control sobre la elección alimentaria. El ayuno intermitente lo que te va a dar es, sobre todo, que aprenda tu cuerpo a utilizar las reservas de energía. Cuando eso está entrenado y funciona ya de forma más establecida, ayuda muchísimo a reducir todos los niveles de estrés y de ansiedad por la comida, pero evidentemente es necesario aplicarlo de la manera correcta y también, se necesita un tiempo de maduración metabólica para que el organismo se adapte y se encuentre en una situación estable en las ventanas de ayuno. Además cuando lo haces con conciencia y le pones ese mindfulness al momento, eso te va a servir también como un aprendizaje interior muy alto. Igual que cuando haces yoga puedes aplicarlo de forma consciente y hacer crecer tu salud emocional y tener un trabajo de crecimiento personal y espiritual; con el ayuno, cuando lo haces con esta consciencia te va a reforzar muchísimo la relación con la comida.

¿El ayuno puede generar desequilibrios o desórdenes alimenticios? 

Como cualquier herramienta si no se utiliza con los correctos pasos y con los correctos asesoramientos puede pasar factura. Igual que el bisturí de un cirujano puede curarnos o hacernos daño, con el ayuno o cualquier intervención de salud pasa lo mismo.

¿Qué proporciones y nutrientes debería tener el primer plato que consumimos después del ayuno?

Independientemente de la razón que utilizas para realizar ayuno intermitente o de los beneficios que buscas tener, es importante que conozcas algunos alimentos con los que puedes salir de ese periodo de abstinencia alimenticia de forma segura. El Ayuno es un estilo de vida que va acompañado de una alimentación saludable, evitando al máximo los alimentos ultraprocesados y basando nuestra alimentación en alimentos de verdad: vegetales frescos y de temporada como las frutas, las verduras, la proteína de calidad como el buen pescado y la carne de pasto, los huevos ecológicos y la proteína vegetal (legumbres, soja fermentada, etc) . Las grasas son esenciales, buen aceite de oliva, aguacate, semillas y frutos secos. Y en el caso de los hidratos de carbono que sean preferiblemente integrales.

Cuando esto va de la mano del ayuno, el ejercicio y una buena salud emocional, los resultados son increíbles.

Mucha gente asocia el ayuno con adelgazar, ¿por qué hay esta creencia? ¿es real?

Me alegro que me preguntes esto, porque es algo que hay que dejar claro, el objetivo principal del ayuno no es adelgazar, aunque es cierto que es una gran manera de hacerlo, aunque es una consecuencia. El ayuno es una práctica que cada vez obtiene mayor popularidad y esto se debe a la gran cantidad de beneficios que otorga al cuerpo. La mayoría seguramente ya los conoce, pero por mencionar algunos tenemos que: desinflama las células, depura el organismo, controla el nivel de insulina, sensibiliza las células a los nutrientes, quema las grasas y como consecuencia de todo esto reduce el peso corporal.

Pero claro está, hay otras razones por las cuales las personas practican ayuno intermitente, por ejemplo, que se ha comprobado que ayunar aumenta la masa muscular, también que disminuye el envejecimiento o aparición de enfermedades o incluso que genera una estabilidad mental por la mayor agudeza de los procesos neuronales.

¿Qué beneficios se pueden conseguir practicando ayuno intermitente?

El ayuno intermitente tiene estupendos beneficios por lo que se puede mantener como estilo de vida. Todos los sabemos, desde hace varios años ya que se han estado realizando estudios y publicaciones al respecto, pero las que no podemos dejar de mencionar son las siguientes:

  • El ayuno desinflama las células, y una célula desinflamada es más sensible a todas las hormonas y sustancias que el cuerpo segrega.
  • Con el ayuno normalizas tus niveles de glucemia en sangre, indispensable para las personas que sufren de diabetes tipo 2.
  • A través del ayuno regularizas la producción de insulina, esto hace que el cuerpo sea capaz de utilizar mejor las grasas para obtener energía.
  • Si practicas ayuno intermitente perderás peso, gracias a que estás requiriendo energía para tus células y que no le estás dando un aporte calórico por eso, el cuerpo busca nutrirse de las grasas almacenadas reduciéndolas.
  • El ayuno te mantiene más concentrado, las personas que realizan ayuno han demostrado un nivel de concentración superior y eso ocurre gracias a que el período sin ingesta eleva los niveles de hormonas que favorecen la vigilia y estado de alerta, haciendo que las conexiones neuronales sean más eficaces.

Una vez más, gracias Edgar por esta entrevista. Es un placer escucharte. Me parece muy importante la manera de vincular el ayuno con los hábitos saludables y me ha gustado descubrir alguno de sus beneficios. 

Me parece importante remarcar que el objetivo siempre debe ser la transformación hacia los hábitos saludables, hacia una alimentación que nos haga bien. No es cuestión de tallas, es cuestión de querernos, cuidarnos y valorarnos.

Espero que hayáis disfrutado tanto como yo y si os han quedado dudas en el tintero, os invito a profundizar a través de su curso TEVAI (clica para comprar) Transforma tu Estilo de Vida con el Ayuno Intermitente. Yo lo tengo y es super completo.

Un beso virtual, 

Coco